A través de la plataforma de
prácticas externas de la Universidad de Castilla La Mancha pude solicitar
prácticas externas en la empresa Caja Rural dada mi formación en Administración
y Dirección de Empresas. En un principio nos reunieron a todos los candidatos a
ocupar los puestos en dichas prácticas para realizar unas pruebas de carácter
psico-técnico y tuve la suerte de ser seleccionado en la provincia de Toledo.
Mi periodo de estancia en Caja
Rural sería para 3 meses en verano, lo cual me daba la oportunidad de conseguir
créditos de la carrera mediante un convenio entre la Universidad y la empresa
Caja Rural.
Los tres meses fueron muy
satisfactorios puesto que aprendí muchas cosas sobre las organizaciones, la forma
de trabajar en equipo y del mismo modo conseguir mi primer contacto con el
mundo laboral. Aproveché las sinergias que este tipo de prácticas me podía
otorgar, la experiencia de compañeros de trabajo y métodos para llevar a cabo
las tareas a realizar, y también cambió mi punto de vista de las organizaciones
radicalmente al tener ese contacto más práctico con la empresa. Realizar
prácticas externas en mi opinión es una gran salida puesto que es una formación
adicional y por la que puedes tener un punto de vista más práctico a la hora de
trabajar. Además la experiencia que ello supone es un plus más a la hora de
completar el currículum personal ya que la experiencia es un factor muy a tener
en cuenta en la actualidad del mundo laboral y te puede otorgar ventajas sobre
otros candidatos a un puesto de trabajo futuro.
En mi opinión las prácticas
externas son el primer paso para tomar contacto con la realidad del mundo
puesto que una vez concluida la carrera es el momento de completar la formación con másteres y
cursos, o bien buscar un trabajo para el cual será de ayuda el haber realizado
prácticas en empresas.
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